Tirarme a la piscina.

Hace ya unos cuantos años (dios mío, qué rápido pasa el tiempo!!!!!) se cruzó en mi camino la posibilidad de montar mi propio negocio. Llevaba unos meses gozando de la libertad de hacer lo que quería y no me planteaba cambiar por el momento pero como me va la marcha..........me decidí.
En poco tiempo como farmacéutica me había dado cuenta que las posibilidades de tener una farmacia eran remotas (eso da para otra entrada) así que pensé qué narices!!!!!!!!! vamos a meter la cabecita en el "negocio" por otro camino.
Tenía mucho que perder pero el apoyo de la gente que me rodeaba fue vital, creían en mí y de momento no les he defraudado :)
No era una farmacia pero se le parecía mucho :D de hecho a día de hoy la cantidad de gente que entra con recetas, pensando que es una farmacia, es significativa.
El comienzo fue duro, no tenía ni idea de llevar un negocio, cómo acertar con los pedidos?, el trato con delegados, atender a cada una...........sobreviví solita y me siento orgullosa y más teniendo en cuenta que un año antes había superado un cuadro grave de depresión.
Sé que ahora se habla demasiado del tema, todo el mundo está "depre", que si la depresión postvacacional.........ni a mi peor enemigo le deseo lo que pasé yo, y supongo que tengo suerte porque lo puedo contar.
En fin.........me probé a mí misma que podía hacer CUALQUIER COSA QUE ME PROPUSIERA, y estos últimos 6 años son un buen ejemplo. Claro que tengo días buenos, malos..........y terribles, pero sigo adelante solita, luchando y sobreviviendo.
No sé lo que ocurrirá dentro de unos años, ni donde estaré, pero la verdad es que no me importa, ya no hago planes a largo plazo, vivir al día y ser feliz es mi prioridad ;)